Son unos fideos blancos muy finos, ligeros y de cocción rápida. Están hechos a base de trigo así que contienen gluten. Se utilizan en la cocina japonesa, pero los fideos llegaron a Japón desde China en el siglo VIII. Posteriormente, durante el periodo Kamakura (1185-1333), el consumo de fideos somen se extendió en la parte oeste y sur de Japón, es decir, donde se cultivaba trigo, llegando finalmente a Edo (el actual Tokio) en el siglo XVIII. Comúnmente se comen fríos durante el verano, a menudo servidos con cubitos de hielo y con trusyu (caldo de pescado y salsa de soja). Una forma divertida de consumirlos es mediante el nagashi-somen (fideos que fluyen), que consiste en lanzarlos a través de un tobogán de bambú para que los comensales los cojan mientras descienden.